El arzobispo de Alepo (Siria), Mons. Chahda, ha visitado la Universidad CEU San Pablo para agradecerles personalmente su generosidad con los cristianos perseguidos en Siria por las diferentes campañas de solidaridad realizadas recientemente. Además, ha querido compartir su testimonio acerca de la realidad que viven verdaderamente los cristianos en Alepo. Entre otras cuestiones, ha señalado que, justo cuando se cumplen dos años de la liberación de la ciudad de Alepo del azote terrorista, “se debe defender más que nunca el respeto a los seres humanos y a su derecho a la vida”. Igualmente, ha querido compartir cómo fueron esos cinco años de terror en los que su ciudad tuvo que sobrevivir sin los recursos necesarios para garantizar la supervivencia de los ciudadanos. A pesar del daño causado por los terroristas y de su intento de desterrar la concordia entre cristianos y musulmanes en Alepo, Mons. Chahda ha recalcado “cómo los cristianos sirios han decidido mantenerse firmes en su fe, por lo que para él siempre serán ‘mártires’ vivos”.
Por su parte, el presidente de la ACdP y de la Fundación Universitaria San Pablo CEU, Alfonso Bullón de Mendoza, ha moderado este encuentro en el que también ha intervenido el director de Ayuda a la Iglesia Necesitada en España, Javier Menéndez Ros. Este último ha querido denunciar la situación de emergencia que viven los cristianos en Siria, que en siete años han pasado del 10% de la población a ser solo el 4%. Asimismo, ha destacado que la comunidad cristiana siria está en el centro de la mayor crisis humanitaria que se ha vivido desde la Segunda Guerra Mundial.
La visita de Mons. Chahda está enmarcada en el viaje que ha hecho a Madrid para presentar, junto a Ayuda a la Iglesia Necesitada (AIN), una campaña para apoyar a los cristianos sirios que luchan cada día por sobrevivir. El proyecto se basa en tres ideas fundamentales: planes de emergencia que faciliten bienes de primera necesidad, iniciativas educativas y de formación pastoral, y proyectos para la reconstrucción de infraestructuras. Esta campaña fundamenta sus principios en el lema “Indestructibles en la fe”, que pretende evitar la desaparición del cristianismo en Siria, así como ofrecer apoyo material y emocional ante la persecución abierta que han sufrido por parte de grupos terroristas.