La Facultad de Derecho ha
celebrado la festividad de su patrón, San Raimundo de Peñafort, con una
misa oficiada por el padre Isidro Molina y un acto académico en el que se ha hecho entrega de la Placa de la Facultad a Garrigues, a la Corte de Arbitraje de Madrid y al Centro Penitenciario de Madrid II; así como premios en diferentes categorías a estudiantes y profesores.
El decano, Alfonso
Martínez-Echevarría, ha inaugurado este encuentro en el que ha recordado la
sólida formación jurídica que reciben nuestros estudiantes, a quienes los
despachos de abogados eligen “por los valores humanos que han desarrollado
durante su paso por las aulas”. El decano ha reconocido a las empresas e
instituciones la actividad que realizan con los profesionales del futuro y la
ayuda que ofrecen en su formación. Asimismo, ha agradecido al claustro de
profesores y al personal administrativo su labor y compromiso para con la
Facultad.
La catedrática
de Derecho Civil y directora del Grado en Derecho, Begoña Fernández,
ha impartido la lección magistral ‘Fundamento para
mantener la legítima hereditaria', con un recorrido de la evolución
histórica de la legítima hereditaria, desde su origen en el Derecho Romano
hasta su aplicación en el Derecho Español Contemporáneo. “Aunque se cuestiona
su vigencia por cambios sociales y económicos, la legítima sigue siendo un
instrumento relevante para proteger la cohesión familiar”, ha explicado.
En su intervención, Fernández ha
comparado el régimen sucesorio de España con otros sistemas legales, como los
de Inglaterra, Estados Unidos, Italia y Francia, destacando diferencias
significativas en la libertad de testar y la protección de los herederos.
Además, ha puntualizado en las variaciones del derecho foral de Comunidades Autónomas
españolas, mostrando cómo han modernizado la legítima adaptándola a las
estructuras familiares contemporáneas.
La catedrática ha concluido
señalando que “aunque la legítima debe mantenerse para preservar la solidaridad
familiar, es necesario flexibilizarla para reflejar las relaciones afectivas y
sociales actuales, proponiendo una reforma moderada en su cuantía y condiciones
de desheredación, y que permita adaptarse a la realidad actual”.
La vicerrectora de
Internacionalización, Ainhoa Uribe, ha cerrado el acto con palabras de
agradecimiento al trabajo del equipo decanal de la Facultad, del conjunto del
claustro docente, del personal administrativo y de las empresas e
instituciones, por hacer posible la formación de todos los estudiantes. Asimismo,
la vicerrectora ha tenido palabras de reconocimiento para todos los premiados y
ha concluido recordando la importancia del futuro de la Universidad, “guía,
faro y luz de conocimiento, que debe ejercer su labor docente e investigadora
con una mirada crítica y ética; siempre a la vanguardia, con actitud innovadora
y adaptándose a las nuevas tecnologías, aplicando siempre los principios
morales y cristianos”.